sábado, 21 de julio de 2007

JUEGO SUCIO - Cap. 3

Los días siguientes fueron días de estudio para Rachid. De acuerdo con los datos que constaban en la carpeta que Mr. Cummings le habia entregado, pudo llegar a Logan, a quien siguió durante varios días, para conocer sus hábitos y costumbres, horarios y lugares donde concurría. Logan vivía solo en una hermosa casa en Brooklyn, cerca del Dyker Beach Park y la entrada al Verrazano Narrows Bridge que une Brooklyn con Staten Island, rodeada de un parque, con entradas para automóvil. Es un lugar maravilloso, desde donde se disfruta de una hermosa vista de la Lower New York Bay, cosa que Logan aprovechaba pues permanentemente los grandes ventanales del living tenían sus cortinas abiertas. Podía hacer eso, porque prácticamente no habia vecinos cercanos. Además su casa estaba circundada por un parque y el perímetro era marcado por elegantes y bien cuidados arbustos .
Sus actividades las llevaba a cabo por todo New York. No tenía un lugar físico donde atendiera clientes, él iba de un lado a otro. Frecuentemente andaba por la zona de los dam de Harlem River, donde en muchas oportunidades pasaba varias horas dentro de depósitos existentes en esa zona. En su propia casa solo recibía a pocas personas, probablemente las más encumbradas dentro de la organización y las de absoluta confianza, pero eso ocurría en contadísimas ocasiones. Esas visitas suelen ser comprometedoras.
En varias oportunidades lo había visto acompañado de Christine, la hija adoptiva de Cummings, quien era un inquietante rubia de elevada estatura, representaba tal vez algún año de edad más de los veintiun años reales que tenía. Era muy mujer. Tenía cabello largo lacio, ojos celestes de mirada algo somnolienta. Muy delgada, de cara angulosa que le conferían un aire exótico. Vestía siempre con ropa de primera línea, lo que la hacía más elegante aún. En algunas oportunidades habían ido a cenar a refinados restaurantes de la ciudad, concurrían a algunos Pubs en el Soho o en Tribecca y otras veces la había visto en casa de su novio.
Logan desarrollaba una intensa actividad nocturna, frecuentando pubs y lugares bailables, a veces solo, a veces acompañado de Christine, excepto los días en que se desarrollaban importantes matches de futbol americano, días en que se quedaba religiosamente en su casa mirando los partidos por televisión en una plasma de grandes dimensiones que se veía desde fuera de la casa. Esos días no recibía visitas. Se concentraba en el goce de su deporte favorito.
En fin… En unos pocos días Rachid ya había reunido información como para tener un panorama de cómo era la vida de Logan, sin importarle si sus actividades eran legales o no, dado que su objetivo era el trabajo que le había sido encomendado.
Mr. Cummings se habia comunicado por teléfono una sola vez a los cuatro días de concertado el pacto, oportumidad en que Rachid le pidió que no lo llamara, porque eso solo serviría eventualmente para comprometerlos y que él se iba a comunicar cuando sucedieran hechos importantes. Y los sucesos importantes surgieron al séptimo día.
Ese domingo se jugaba un sensacional match de football, nada menos que los Tennessee Titans contra los New York Giants y Robert Logan no pensaba perdérselo, asi que se preparó en su casa frente al plasma para disfrutar del juego.
Rachid sabía que eso iba a ocurrir y que Logan estaría solo en su casa, así que decidió llevar a cabo su cometido esa misma noche.
Llegó a las inmediaciones de la casa de Logan. Era un barrio residencial tranquilo. Rachid estacionó su auto a unas seis cuadras de la casa y llegó caminando, pasó el cerco perimetral y se escondió entre los arbustos, eligiendo un lugar desde el cual dominaba toda la casa y especialmente el ventanal del living. Desde allí provisto de un binocular, observaba hasta los movimientos mas finos, dispuesto a esperar la finalización del partido, el momento en que se apagaran las luces y Robert se retirara a descansar en su dormitorio de la planta alta. Entonces pondría en marcha la operación.
Rachid permaneció en un lugar oscuro, bien protegido de la vista de cualquier transeúnte ocasional, que por suerte eran escasísimos y vió a Logan caminando por el amplio living de su casa, en desplazamientos normales para cualquier persona. Faltaba poco para que diera comienzo el match de football y estaba tomando todos los recaudos previos para concentrarse en su deporte preferido. Se dirigió hacia un bar que había en un ángulo y se sirvió un generoso vaso de bourbon y se sentó cómodamente en un sofá, frente a la pantalla, de espaldas a su observador. Rachid veía la pantalla completa y del sofá donde se había repantigado Logan, sólo asomaba su cabeza.
El partido comenzó y Rachid sacó cuentas del tiempo que necesitaría esperar para poner en marcha su plan. Le faltaba un buen rato, pero la paciencia es una de las virtudes que debía poseer un profesional como él. Sabía que era temprano, pero quería asegurarse que Logan estuviera en su casa y solo.
Promediaba el primer tiempo y la escena seguía siendo la misma, cuando llegó a la casa un lujoso automóvil que estacionó frente a la puerta de entrada, tocó un fuerte bocinazo y descendió una mujer con aire decidido. Logan se incorporó sorprendido con su vaso en la mano, se dirigió hacia la puerta y abrió.
A pesar del corto tramo que recorrió a pie hasta la puerta, Rachid reconoció inmediatamente a la mujer. Era Christine. No fue muy efusivo el recibimiento que Logan le tributara a Christine. Tal vez porque estaba ensimismado mirando el partido. Tal vez no estaba en los planes de Rachid la presencia de Christine esa noche. Es más, suponía que no vendría dada la costumbre de Logan de mirar los partidos sin que nadie ni nada lo distrajera, pero evidentemente esa noche, las cosas no sucedían como siempre.
Desde su punto de observación vió a la mujer despojarse de su abrigo, mientras Robert retomó su posición en el sofá, volviéndose a concentrar en el partido. Prácticamente no le prestaba atención a Christine, quien fue hasta el bar y sirvió dos vasos de bourbon, una para ella y la otra para su novio.
Christine regresó del bar, le dió uno de los vasos a su novio y comenzó a hablarle de pie frente a él. Robert le hacía señas de que se desplazara a un costado porque le impedía la visual. Ella seguía hablando y gesticulando, pero aparentemente no lograba que Robert entrara en la conversación. Se la notaba irritada por su manera de moverse y por sus ademanes, mientras su novio permanecía impasible sentado en el sofá y mirando el partido.
La joven optó por sentarse en el sofá al lado de Robert, inclinándose hacia él en actitud presuntivamente cariñosa, mientras Logan continuaba mostrando una actitud un tanto hosca. Rachid pensó que la mujer había cambiado de táctica; trataba de lograr su atención mediante la persuasión.
Continuaba observando con sus binoculares tratando de interpretar a través de los movimientos lo que pasaba entre ellos. En un momento, luego de haber sufrido varios rechazos a su acercamiento, Christine fue inclinando su cuerpo y su cabeza hacia Robert, hasta tal punto que el respaldo del sofá tapó totalmente a la joven, interpretando que se encontraba acostada con su cabeza en la falda de Robert. Apenas unos segundos después, vió como Logan se incorporaba súbitamente, propinaba dos fuertes golpes en la cara a su novia y se acomodaba los pantalones. Ella se incorporó también y él continuó golpeando a la joven, que trastabilló en el medio del living. No contento con eso, Robert le propinó un par de puntapiés y regresó nuevamente hacia el sofá.
Christine se incorporó con la boca ensangrentada, se dirigió hacia donde habia dejado su abrigo y extrajo de él una pistola apuntando con ella a Robert y gritándole.
Robert se incorporó levantando los brazos y yendo hacia ella. En ese momento sonaron dos disparos y Logan cayó.













(continuará)

13 comentarios:

Lorena dijo...

oooppps, o sea que la chica ayudó al profesional a matar al narco... que buen desenlace, no cabe duda, eres un maestro... ahora solo falta ver como lo concluyes... muy bien!
saludos y nos vemos en unos dias!

Etèria dijo...

Eres un genio, te le he dicho cien veces ¿no?. Bueno pues 102 con esta, eres un genio.

Besos

Valeria Elías dijo...

uffff, mucho pa leerrrrrrr y mi tiempo cortooooo, pero bueno.... dejo besos

Libelula dijo...

Excelente relato.. detallado, tal como me gustan.
Volveré por la continuación..
:)

peregrina dijo...

Leí sólo esta parte, y puedo observar sosas interesantes.
La puntualización descriptiva del ambiente y el modo de “preparar” el escenario. Muy bien la descripción de la rubia ( pero no usaría el adj inquietante). El resto muy bien y el final como a mí gusta, corto sin muchas vueltas como un buen golpe,salvo por ese continuará...

Avisa

MALEFICABOVARI dijo...

GUAUUUUUUUUUUUUUUUUUUU, QUÉ FUERTEEEEEEEEEEEEEEE¡¡¡¡ La tía entra a saco en el juego, joder... y porqué continuará... no está ya muerto el tipo????¿¿¿¿ Ay, que me la lías cn el matón profesional, no jodassssssssssssssssssss. Bueno, en cualquier caso, cómo describes de bien, qué peli de género policiaco me estoy comiendo encantada, y chico, que generas suspense y todo.... un placer¡
Bssssssssssssssssssss, continúo... esperando...mas¡

LA_ARAÑA dijo...

ups...ups...tendara que devolver el dinero....???
quizas como terminara!!!
que sorpresa!!!

espero el CAP. 4

SALUDOS

tejiendo y tejiendo....

Lilith dijo...

¿Una Barbie con pistola? Eso huele mal... alguien le quiere dar la vuelta al matón. 8{
¿Y si resulta que el blanco es el, y ella un agente doble, y el viejo un poli, y Nathalie la novia de la Barbie... y el dinero es falso? jajajaja ¡MAAAAAS!

AnaR dijo...

Ya me rompiste algún esquema y volviste a intrigarme...

Saludos

electrah dijo...

uy!!que lio!y ahora como se arregla todo esto??
voy viendo que necesitaré mas paciencia que Rashid para esperar el proximo capítulo.mmmmmm,no te demores!!!!!

Sirena dijo...

Me he leido los tres capitulos, y déjame felicitarte, amigo. Me encantaron. :)

MAYA dijo...

Dios!!!!!!!!!! Me voy arriba para leer, le disparó!!!!!!! Pero también con la indiferencia cualquira no? Y los golpes y las patadas.

Voy arriba, lo siento...esto es una droga.

Maya

Anónimo dijo...

Yo me esperaba de todo menos eso.. Bien por ti!